
Seis arcos de hierro, una pérgola del mismo material, unidos por cadenas con ramas de rosales trepadores entrelazados, delimitan y finalizan la parte formal del jardín. LA ROSALEDA
Desde los laureles nobilis que custodian el miliario romano, y mirando hacia la secuoya parece un lago multicolor a cuya orilla se asoman árboles de los cinco continentes. Cada uno con su color, su forma, su aroma...y ¿Por qué no? con su personalidad. Dicen que a finales del siglo XVIII con el inicio de los jardines naturalistas ingleses, corriente tan presente en este jardín del Coto de Ntra Sra del Carmen, el diseño y ejecucion de estas grandes obras corría a cargo de un grupo de profesionales, desde al arquitecto , el Ingeniero agronomo...y que les gustaba plasmar su diseño en acuarelas, técnica basada en las transparencias y el colorido fundamentalmente. Pues bien, si cada rincón del jardin es un cuadro, sin duda esta panorámica se lleva la palma! Sin desmerecer la vista hacia el monte autóctono. Nuetro particular paisaje robado...Maravilloso punto de fuga!!
Técnicamente la rosaleda, es por definición un recinto especializado en exhibir variedades o especies del genero rosa. La del jardín del Coto, se puede considerar rosaleda conservatorio, pues en ella se aprecian diferentes especies silvestres, así como ejemplares antiguas. Ejemplo de estas últimas está la rosa veilchenblau obtenida en 1909 por G.C. Schmidt como resultado de la hibridación de la variedad Crimson Rambler con una variedad desconocida.
Son también muy significativos los rosales tipo polyantha, entre otros la variedad Marie Pavie obtenida en 1888 en Francia. No nos olvidamos del deleite a nuestros sentidos con la rosa de provins o gallica, una de las variedades más antiguas originaria de Europa occidental y meridional, se cultiva desde 1500, muchas veces con fines medicinales.
Aunque podría enumerar hasta 15 variedades más de rosales, casi todos antiguos, terminaré nombrando la cascada de flores blancas de nuestro rosal de petimini.
Aunque podría enumerar hasta 15 variedades más de rosales, casi todos antiguos, terminaré nombrando la cascada de flores blancas de nuestro rosal de petimini.